INTERNACIONAL.-El asesinato de Villavicencio se dio en un momento en que el país sufre una escalada de la violencia por la acción de bandas criminales.
A diario se reproducen múltiples informaciones de asesinatos, matanzas, extorsiones, ataques con explosivos, entre otros delitos, que han sembrado terror entre los ecuatorianos que sufren de este tipo de hechos violentos desde hace algo más de dos años.
Un vehículo acribillado a balazos es rodeado por policías mientras custodian el hospital donde fueron llevados varios de los heridos tras el ataque en el que el candidato presidencial Fernando Villavicencio fue asesinado a tiros en Quito, Ecuador, el miércoles 9 de agosto de 2023. Villavicencio fue asesinado fuera de una escuela cuando ingresó a un vehículo después de un mitin de campaña.
Ecuador cerró 2022 con la mayor tasa de muertes violentas de su historia, al registrar 25,32 por cada 100.000 habitantes, la gran mayoría asociada, según el Gobierno, al crimen organizado y al narcotráfico, que ha ganado fuerza en la costa y ha convertido a los puertos en grandes trampolines para la cocaína que llega a Europa y Norteamérica.
Justamente, la lucha contra la criminalidad ha sido una de las principales promesas de los candidatos que aspiran a suceder en la presidencia al conservador Guillermo Lasso en las elecciones generales extraordinarias convocadas para el próximo domingo 20 de agosto.
Partidarios del candidato presidencial Fernando Villavicencio se refugian después de que lo mataran a tiros al final de un mitin de campaña frente a una escuela en Quito, Ecuador, el miércoles 9 (martes en RD) de agosto de
Además de Villavicencio, para los comicios presidenciales se habían inscrito el ambientalista Yaku Pérez, la correísta Luisa González, el experto en seguridad Jan Topic, el exvicepresiente Otto Sonnenholzner, el político Daniel Hervas, el empresario Daniel Noboa y el independiente Bolívar Armijos.